Queridos lectores, está claro que, aunque nuestra capacidad sorpresiva va menguando con los años, siempre hay algo que la despierta repentinamente y hace que volvamos a plantearnos lo de que Dios creo al hombre a su imagen y semejanza. A mí eso siempre me ha parecido rarísimo, de verdad.
Yo, que estoy recién resucitada y ando como loca de aquí para allá recuperando el tiempo perdido, tuve que recurrir hace unos días al médico. Sí, os confirmo que cuando se resucita, se resucita con los mismos achaques que uno tenía en vida, con lo cual, esto no es ningún chollo. Pero menos da una piedra y sobre todo si es una piedra donde está inscrito tu nombre y apellidos con un angelote en medio.
![]() |
Como veis, lo que se dice buen aspecto, buen aspecto... no se tiene. ("La Resurrección de Lázaro" de Juan de Flandes). |
Continúo. Yo, que sólo voy al médico en casos de urgencia extrema y casi en peligro de muerte, se me ocurrió acudir el otro día para solucionar un problema de dolor muscular en el cuello que llevaba sufriendo años por absoluta dejadez. Ni corto ni perezoso, mi médico de cabecera al ver las radiografías poco más que me vuelve a condenar a muerte. Que si tengo un desgaste galopante, que si llego a vieja, tela marinera lo que me espera... Vamos, la alegría de la huerta. Y nunca mejor dicho porque la consulta está rodeada de berzas, grelos y demás hortalizas de consumo habitual por estos lares. Ante semejante diagnóstico -os recuerdo que estoy recién resucitada y no estoy para bromas-, le pregunté tímidamente si no se arreglarían los dolores con un poco de fisioterapia. "Nada, eso no te va a hacer nada". Haciendo acopio de paciencia y valentía, le sostuve la mirada para recibir su veredicto. "Media pastillita de Valium todas las noches y si te va bien, te lo receto de manera crónica". La verdad que lo primero que pensé fue en comenzar a traficar con esas pastillas que estoy segura que en el mercado negro se venden estupendamente y a precio razonablemente caro. Como os contaba hace muchos años en mi particular Purgatorio, he debido de tener un ascendiente lejano delincuente porque os juro que le afirmé con la cabeza mientras extendía la receta y en lo único que pensaba era en buscar el contacto idóneo para dar salida al material. A veces hasta yo misma me sorprendo con mis pensamientos.
Por supuesto, acudí a la oficina de farmacia más cercana para adquirir mi primera cajita de Diazepam y... no se me asusten, también la última si Dios quiere. Lo que sí hice fue llamar a un fisioterapeuta que, tan solo con una sesión, ha hecho que desaparezca casi todo el dolor. Vamos, un encanto mi ex médico de cabecera y sus métodos matasanos y "devuelveresucitadosalatumba". Y no os preocupéis, sigo durmiendo de un tirón, sólo que ahora tengo una mano a la que agarrarme, aunque sea de cartón.
Eso sí, si alguno de vosotros necesita un Valium, tenéis mi contacto en el perfil.
Cuidaos mucho y no os fiéis de nadie. Besos, abrazos y mimos varios.
Eso sí, si alguno de vosotros necesita un Valium, tenéis mi contacto en el perfil.
Cuidaos mucho y no os fiéis de nadie. Besos, abrazos y mimos varios.
Sylvie Tartán
¡Bienvenida Sylvie, cuán larga ha sido la espera! Pero sin duda ha valido la pena, porque ya estás aquí de nuevo en carne mortal. Bueno, o inmortal, dependiendo de si nos encontramos ante un caso de resurrección, transmutación o de mera reencarnación... en algo. Sería muy interesante que nos aclarases este punto a tus legiones de fans y te damos la bienhallada en tu encantador blog.
ResponderEliminar¡¡Tú sí que eres encantador, Nauj!! ¡Así da gusto la resurrección, mecachis, qué suertuda soy! ¡Mil besos, querido! ¡Me alegra mucho volver a leerte!
EliminarQuerida Sylvie, bienvenida al mundo del terruño. Has probado a tratarte con un buen vino con sus polifenoles y todo? ������
ResponderEliminar¡Ja, ja, ja, Belly! Me estoy tratando con ello, no te creas, y me va estupendamente. Me relaja los músculos y también el cerebro, cosa que me viene mucho mejor todavía. ¡¡Muchísimas gracias por esta cálida bienvenida!! ¡Un besazo grande!
EliminarXD
ResponderEliminar¡Gracias, Mninessie! ¡Abrazote!
EliminarQue alegría leerte querida Sylvie, bienvenida la resurrección
ResponderEliminar¡Bien hallados todos mis seguidores nuevos y antiguos! ¡Besitos querida! ¡Qué alegría leerte de nuevo también a ti!
Eliminarjejeje, que tremenda!
ResponderEliminar¡Gracias mil, Ernestiño! ¡¡Un besazo!! ;)
Eliminar